País generoso, sociedad conservadora, de pensamiento
cerrado, anacrónica, segregada por clases sociales y apariencias, racista y
hostil con la tolerancia y la solidaridad que algunos si profesan porque
obviamente, este suelo ha tenido, tiene y tendrá muchos hijos que la defenderán
y condenaran cualquier injusticia y a
cualquier opresor. Pero por otro lado, a
veces, considero que este país premia al revés (así como dice Galeano) y se me ocurre la frase, el dardo irónico de: “que
generoso país es Guatemala”.
Qué decir de la elite de empresarios poderosos, esos del CACIF,
los canches muy bien trajeados, de
billeteras gordas y cuentas en el exterior, viven acá pensando que este país es
su finca, de ellos y solo para ellos… esa élite política de toda la vida,
señorones que compran su respeto muchas veces a base de fregar a la patria, los
únicos dueños del país, así es, un club selecto y pomposo, hermético y pomposo,
del cual querido lector; no somos parte. “Generosa” sociedad que ignora
indiferentemente el amaño de poder de los oligarcas, de esos clásicos criollos
que quedaron en condición privilegiada por sus compinches españoles pero
gracias a la explotación del pueblo, que “generoso” país soportando sus
salarios tercermundistas. ¿Y cómo olvidarse de los gobernantes que tenemos?
(títeres “generosos” al servicio de los recién comentados), politiqueros
partidarios de continuar con el mismo sistema, con ese llamado “orden”
verdaderamente; desordenado y desigual, engañando a la gente, robando y ganando
pistales, país “generoso” con la mal llamada clase política.
Pero en serio; lector, que querer a Guatemala es un
masoquismo contradictorio, porque de verdad le digo que se le quiere a este suelo,
palabra. Se le quiere, sufre y goza. Imagínese lector; le pondré tres ejemplos
de casos donde no ha habido generosidad por parte de este país “generoso”, de
personajes que han puesto en el mapa a Guatemala en sus diversas profesiones
pero que acá, antes de ser reconocidos en el exterior, no se sabía mayor cosa
de ellos y no se les daba el debido apoyo, no se les tendió la mano pues, incluso
algunos pasaron hambre y otros sucesos que cotidianamente se viven en este país, y no me juzgue diciendo que no tiene que ver
lo uno con lo otro, si bien los siguientes hechos son de deporte y arte, cabe
destacar que dichas vocaciones y actividades mejoran la calidad de vida y
agrandan el espíritu festivo (tan necesario en tiempos oscuros), tanto de quien
las realiza como de quien las observa y; tomando en cuenta la obvia obligación
que tienen de brindar apoyo y ayuda los ministerios gubernamentales que
“responden” por estas, pero que en realidad solo los voltean a ver cuando ya
han alcanzado trascendencia por esfuerzo propio, considero que mencionar estos
hechos es totalmente acorde al tema.
Y es que es sabido que ni a Ricardo Arjona (no es el tema si
le gusta o no), ni al gran atleta Erick Barrondo los voltearon a ver ni
apoyaron acá en su propio país, a uno se
le tomó en cuenta cuando ya figuraba en México y después, pues ni modo, le
dedicó una canción al país de los mariachis ¿y cómo no? y al otro; el orgullo
de Chiyuc San Cristobal, se le comenzó a reconocer después de su triunfo en los
panamericanos y ahora que es un medallista olímpico de 1er nivel, es usado como
imagen de diversas y “generosas” empresas y recibe todo tipo de elogios de
parte de los “generosos” políticos, ¿ahora si, qué país generoso verdad vos!?,
y el tercer caso; ¿qué más repudiable
que el trato que tuvo el genial Miguel Ángel Asturias cuando por orden del presidente
de la época, Coronel Carlos Castillo Armas, fue echado del país saliendo por la
puerta de atrás?. Años después de ese mal trato Asturias ganaba el Lenin de la
paz y el nobel de Literatura, así, trataron al guatemalteco que hizo a los
intelectuales suecos voltear hacía acá, y así sobran hechos que la verdad, poco
sorprenden, ¿pues dígame usted si le sorprende algún caso en este país?.
Y en cambio; este país demostró hace solo unos días su
“generosidad” al papá del genocidio guatemalteco, General Efraín Ríos Montt, y
confirmo la falta de justicia presente, pues hace poco se dio a conocer que le
fue otorgado un amparo en el proceso legal en su contra. Nuestro Alcalde;
también es muy “generoso” viera usted, de verdad, le encanta ponerle nombres a
pasos a desnivel y puentes en honor a gente que admira, ¿y qué mejor que
nombrarlos como el aprendiz de dictador Rafael Carrera, o el del dictador
graduado; Jorge Ubico?, “Dios patria y dictadura reeeey”. También hay
generosidad con las transnacionales, no le quepa duda y etc. Y etc.… Claro, en
muchos lados suceden este tipo de hechos, hace poco leí la noticia de que en
Chile el Presidente Piñera homenajeo post mortem “generosamente” al ex dictador
Augusto Pinochet, acto que es para que la acidez estomacal se haga presente en
cualquier persona consiente y que esté en contra del fascismo y la dictadura,
pero por acá, mientras tanto, el pueblo “generosamente” premió a un ex militar
implicado en el conflicto armado, con nada menos y nada más, que la presidencia
de la republica, ¡qué país generoso!.
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